INVITACIÓN





INVITACIÓN

Intentar establecer linealidad en la vida es pretender, seguramente, que sea perfecta y si lo fuera así, no sería vida, sería muerte. Pero como una línea es una sucesión de puntos, estamos inevitablemente destinados a trazarla, así optemos por quedarnos quietos, dormidos o tengamos que permanecer en coma. ¿Quién podría definir su trazo?

A partir de este momento, aquellos puntos de sucesión en mi vida definen, arbitrariamente, una serie de eventos incluso inesperados para mí.

Digo esto porque aunque cada suceso de la vida resulta abrupto así creamos estar preparados para el próximo minuto, podría estar hiriendo susceptibilidades o fortaleciendo empatías. No lo sé.
Simplemente quiero seguir compartiendo contigo lo que soy, quien soy, como soy. Los detalles los dejo, como hasta ahora, a tu imaginación.

Te invito para que, a partir de ahora, disfrutes de mi viaje relámpago en Brooklyn


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